Como todo en la vida, las cosas evolucionan. Y eso podemos verlo con la regla y los métodos que utilizamos para sobrevivir a la semana roja. Los tampones y las compresas ya no son prácticos (por no hablar de lo incómodo) y nos hemos aficionado a la copa menstrual, una alternativa que nos permite enfrentar nuestra realidad mensual con un poco más de estilo y sin tanta contaminación ambiental.
La copa menstrual no tiene nada de nuevo. De hecho, la primera patente data del año 1937. Y su diseño no ha cambiado casi nada en estos años. Sin embargo, no fue hasta la década de los 90 que empezó a popularizarse. Ya sabemos que todo lo que tenga que ver con nosotras siempre tarda mucho más en aprobarse y darse a conocer.
Así que, si todavía no la has probado, prepárate para darle una oportunidad a algo que cambiará tu vida (y tus días) para siempre.
¿Qué es en realidad?
Sí tengo que definirlo de la manera más grotesca y realista te diría que, básicamente, es como un tapón (que no tampón) que te introduces en la vagina para detener el flujo de la regla. Desagradable, lo sé. Pero también es realista.
¿Cómo se utiliza?
No es tan complicado como algunas personas hacen ver. Lo primerísimo de todo es lavarte las manos (de verdad, hazlo), después es estar cómoda con tus manos y tu propia anatomía. Se trata de encontrar una manera cómoda de sentarte y de doblar la copita de silicona de tal manera que te las puedas introducir sin problema.
Una vez lo pillas, no es tan horrible.
Ahora voy a intentar convencerte
- Porque el planeta te necesita: La copa menstrual es un buen recurso si quieres limitar tu uso de plásticos, ya que prácticamente eliminarías por completo los desechos menstruales.
- Porque el dinero duele: ¿Tu sabes la de dinero que nos gastamos en un producto que es prácticamente una obligación consumir para nuestro día a día? Con este chisme podrás ahorrarte unos euros.
- Porque la libertad es tener opciones: ¿Quieres saltar de un trampolín? ¿O pasar el día en el sofá viendo Netflix? Con la copa, tienes la libertad y la posibilidad de elegir lo que quieres hacer sin tener que estar condicionada. Incluso tirarte de bomba a la piscina.
- Porque las manchas son del diablo: Adiós a las manchas en las sábanas o en la ropa. La copa es tu nueva mejor amiga, lista para protegerte en tus peores momentos.
¿Y cómo se limpia este trasto?
Es como limpiar un vaso... Agua caliente, jabón, y un poco de valentía. Y listo, tu copa menstrual está lista para otro ciclo menstrual.